Cuántas veces nos preguntamos ¿Porqué me sucede esto a mí? ¿Por qué siempre hay cosas a mi alrededor que no me gustan? ¿Por qué siempre tengo gente chismosa cerca de mí? ¿Por qué siempre me consigo con hombres o mujeres celosas?¿Por qué me persiguen gente tranposa? ¿Por qué? ¿Por qué? y seguimos preguntanos ¿Por qué? . Llegamos a pensar que Dios lo quiere así, que el mundo cada día está pero, que ya no se puede vivir, y así justificamos todo eso que nos rodea y nos mantiene intranquilos e insatisfechos.
¿Conoce usted la Ley de causa y efecto?, bueno esto quiere decir que para que ocurra algo tiene que ser originado. Lo cierto es que aún cuando no aceptemos desde un principio que todas las cosas que vemos a nuestro alrededor son reflejo de nuestros pensamientos esa es la única verdad. Por ejemplo si estamos teniendo poblemas de sobrepeso ¿Cuál cree usted que será el motivo? será que otro quiere que yo sea gord@, nó simplemente que estamos comiendo más de lo necesario, que no estamos haciendo ningún tipo de ejercicio, o el tipo de comidas no es el más sano y hay algo más ¿Por qué y para qué estoy comiendo tanto? ¿Qué será lo que pienso acerca de mí? Ahora lo vé,
Nuestro cerebro siempre está activo estemos consciente de ello o no, constantemente estamos creando con nuestra mente, y todo lo que nos rodea es consecuencia de nuestros pensamientos. Qué podemos hacer para cambiar todo eso que veo que no me gusta, bueno cambiando nuestra manera de pensar. y ¿Cómo hacemos tal cosa? Si decidimos que queremos cambiar lo que vemos y no nos gusta, entonces comenzamos por cambiar nuestros pensamientos acerca de nosotros mismos, acerca de las otras personas, aceptarnos a nosotros mismos y aceptar a las personas tal como son sin querer cambiarlas, veremos el milagro del cambio realizarse.
"Cuando veas a un hombre bueno trata de imitarlo, cuando veas a un hombre malo, examínate a tí mismo"
Confusio

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por tus comentarios